Durante el mes de enero y febrero nos han administrado las 2 dosis de la vacuna Pfizer. Hemos tenido que luchar mucho para que esto pasara, pues según las fases del Plan de vacunas, aún no nos tocaba...
Fueron días caóticos donde el equipo de vacunas nos programaba día y hora para venir al centro, pero al día siguiente nos decía que se trataba de un error... así hasta 3 veces. Finalmente, lo conseguimos y parece que se habré, por fin, un nuevo horizonte.
Ha sido y es un año muy duro para todos, usuarios, familias, profesionales y para la propia empresa. Pero de toda experiencia difícil se aprende, y nosotros hemos aprendido varias cosas:
- La importancia de nuestro trabajo en las personas mayores y/o frágiles. Sabíamos que fomentábamos su autonomía, pero no hasta qué punto.
- La importancia de ir todos a una y estar unidos, familias, usuarios y centro. La comprensión y paciencia han sido ingredientes básicos.
- La importancia de poder despedirse de un ser querido. Algo que ha afectado a millones de personas y que esperamos que las nuevas tecnologías puedan ayudarnos más.
Ojalá las personas que han sido víctimas del virus, pudieran mirar hacia atrás y brindar con nosotros, seguramente compartirían nuestra alegría.
Esperamos que este año, sea un año con mucho amor, ilusión y gratitud, y podamos acercarnos a ser quien éramos.
Un ABRAZO, del equipo AMUNT.