Cuando naces estoy
esperándote;
quiero pesarte, medirte
y a tu madre presentarte.
A partir de aquí,
voy a acompañarte durante
muchos años
para vigilar que no
sufras daños
y curarte si es así.
Procuraré que seas feliz
pero vendrán momentos
duros
en los que podrás contar
conmigo aparte de en los tuyos.
Te cuidaré,
seré tus brazos y tus
piernas si lo necesitas.
Te acompañaré y
escucharé,
tendrás mi hombro para
sostenerte cuando problemas tengas.
Te aconsejaré y
recomendaré,
hábitos que beneficien a
tu salud
y si te surge alguna
inquietud
tus dudas resolver
intentaré.
Nos veremos a menudo
durante el camino,
pero los escenarios
cambiarán.
Si conmigo quieres dar,
tan solo un botón has de
apretar.
Cuando quieras
despedirte,
mi mano y atención te
ofreceré,
porque desde el nacimiento
hasta la muerte
tu compañera de viaje seré.
Natalia Cuenca
Enfermera de Avi Amunt y Neuro Amunt